Y ya tenemos candidatos a comisarios europeos

En entregas anteriores hemos desmenuzado el resultado de las elecciones europeas, los equilibrios en el nuevo Parlamento y los primeros nombramientos europeos. 

Ahora, la presidenta Ursula von der Leyen presentaba el martes 17 de septiembre (con una semana de retraso con respecto a la fecha inicialmente prevista) la lista de los candidatos a comisarios, propuestos finalmente por los 27 Estados miembros. 

Este retraso refleja las dificultades que ha encontrado la presidenta. Sabemos que quería una Comisión paritaria entre hombres y mujeres, sabemos que solicitó de todos los Estados miembros dos nombres, uno de hombre y otro de mujer, y sabemos que fracasó al final en su intento, aunque consiguió llegar al 40 % de mujeres al final (16 hombres y 11 mujeres). En cambio, ha propuesto a más vicepresidentas ejecutivas mujeres (cuatro) que hombres (dos). 

La finlandesa Henna Virkkunen (Soberanía Tecnológica, Seguridad y Democracia) y la socialista rumana Roxana Minzatu (Gente, Habilidades y Preparación) tendrán también el rango de vicepresidentes, y se añaden a Kaja Kallas, ya designada por los Estados miembros como alta representante para Política Exterior y Seguridad. 

La nueva Comisión refleja con bastante fidelidad el resultado de las últimas elecciones europeas. Tenemos un Parlamento Europeo y una propuesta de Comisión con mayor peso de la derecha y de la derecha extrema y menor peso de los socialistas. 

Cada candidato ha recibido de mano de la presidenta una 'carta de misión' que define su ámbito de competencias y los resultados que se esperan de su gestión. 

Dos hechos reflejan claramente este nuevo equilibrio de fuerzas. Teresa Ribera es el gran peso específico que en la familia socialista ha conseguido el PSOE. No olvidemos que Pedro Sánchez es el actual presidente de la Internacional Socialista. 

Tenemos también un vicepresidente propuesto de la ultraderecha, el italiano Raffaele Fitto, responsable de la cartera de Cohesión y Reformas. 

El partido de Meloni y Fitto, Hermanos de Italia, fue el más votado en su país en las elecciones europeas de junio. En la Comisión anterior solo hubo un comisario de extrema derecha, el nuestro, el polaco Janusz Czesław Wojciechowsk, que no dejará un recuerdo imborrable. Este sería el encargado de supervisar al comisario de Agricultura. 

Hablamos de comisarios propuestos, porque los candidatos a comisarios van a tener que comparecer ante las Comisiones correspondientes del Parlamento Europeo para conseguir su visto bueno. 

Sabemos que esto nunca es una simple formalidad. Los candidatos a comisarios pueden tener que repetir su audiencia si la primera vez no han sido suficientemente brillante (como le aconteció al comisario de Agricultura saliente), o incluso ser rechazados. Así aconteció, por ejemplo, en 2019 con los comisarios designados Rovana Plumb, de Rumanía, y László Trócsányi, de Hungría, por conflicto de intereses. 

Los hearings han podido empezar el 23 de septiembre. Estaba previsto que, en el mejor de los casos, la nueva Comisión podía ser a partir del 23 de septiembre para entrar en función el 1 de diciembre. Pero con un retraso ya inicial de una semana, y los posibles problemas que podrían tener algunos candidatos, este calendario parece demasiado optimista. 

Algunas curiosidades 

Este proceso de nombramiento ya nos ha reservado algunas curiosidades. Aunque el propósito central de esta entradilla son los cargos relacionados con la Agricultura y la Alimentación, no nos resistimos a hablar brevemente de ellas. 

El caso esloveno: todavía no tiene candidato oficial, porque la Comisión Parlamentaria Nacional no ha dado todavía su visto bueno al nombramiento de la persona propuesta, Marta Kos.

El caso francés: a última hora, el comisario saliente, que ya había sido confirmado por París, ha dimitido oficialmente por “razones personales”. Todo el mundo sabe que su relación con una presidenta con fuerte personalidad como Ursula von der Leyen no eran buenas. París ha nombrado en su lugar al liberal Stéphane Séjourné, que será vicepresidente ejecutivo con las áreas de Prosperidad y Estrategia Industrial. 

Por primera vez hay una cartera de Defensa y del Espacio. Ocupada, en un claro gesto de cara a Rusia, por el ex primer ministro lituano Andrius Kubilius. 

El caso español: España ha propuesto a Teresa Ribera con la clara intención de conseguir una Vicepresidencia y la cartera de Medio Ambiente. Desde el Partido Popular europeo, varios miembros (y, en primer lugar, el PP español) ya habían señalado sus reservas al respecto. Al final, España obtiene una de las 6 Vicepresidencias ejecutivas y Teresa Ribera ostentará la cartera de Competencia. Esta es una cartera de peso, ya que la política de competencia forma parte de las políticas centrales de la Comisión. La, recientemente confirmada por la Corte de Justicia Europea, histórica multa de 2.424 millones de euros a Google es buena muestra de ello. 

Además, su Vicepresidencia se titula “de la transición Limpia, Justa y Competitiva”. Ecológica como de la todopoderosa cartera de Competencia. En la carta de misión se indica que deberá "modernizar la política de Competencia" de la Unión Europea, pidiéndole una "simplificación de las ayudas de Estado". 

Entre las instrucciones directas que la alemana indica para la española, la presidenta de la Comisión subraya que Ribera revisará "las normas de ayudas de Estado para permitir apoyo para la vivienda, principalmente para eficiencia energética y vivienda social", recogiendo así una de las reclamaciones que los socialdemócratas europeos hacían a Von der Leyen antes de aprobarla como presidenta. 

En el ámbito climático y de energía, deberá coordinar el trabajo para cumplir con los objetivos climáticos, especialmente la reducción de un 90 % de las emisiones para el año 2040, y "guiar el trabajo para reducir los precios de la energía", aunque este trabajo deberá hacerlo de la mano del comisario de Energía y Vivienda, el danés Dan Jørgensen. 

No olvidemos que en el Informe Draghi se apunta que el mayor coste de la energía en Europa es una de las causas importantes de la pérdida de competitividad de la economía europea. 

Tendrá que trabajar mano a mano con Clima, el holandés Wopke Hoekstra (Clima y Crecimiento Limpio y de Cero Emisiones), la sueca Jessika Roswall (Resiliencia del Agua y una Economía Circular Competitiva) y el danés Dan Jørgensen (Energía y vivienda). 

Sustituye a Josep Borrell, el todavía actual alto representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad; un cargo sin duda importante, pero que ha hecho que, durante los 5 años de la primera Comisión Von der Leyen, España no haya tenido en la práctica comisario en activo. 

El comisario para la Agricultura 

La primera cosa para destacar es el cambio del nombre de su Comisaría. Hemos pasado de la ya clásica “Agricultura y Desarrollo Rural” a “Agricultura y Alimentación”, desapareciendo del título el Desarrollo Rural, aunque parece que no las competencias sobre el segundo pilar de la PAC. 

En propias palabras de la presidenta Von der Leyen: “Será el responsable de acometer el Diálogo Estratégico sobre el Futuro de la Agricultura dentro del Colegio de Comisarios que, en sus cien primeros días de mandato, presentará sus primeras conclusiones en la materia” .

El Partido Popular europeo había hecho saber desde el principio que quería que esta cartera fuera ocupada por uno de sus miembros. Se trata del luxemburgués Christophe Hansen, eurodiputado desde 2018. Anteriormente, estuvo activo en la política local y ha asistente en el Parlamento europeo y varias veces consejero en las diferentes representaciones de su país en la capital belga. 

La carta de misión de Hansen menciona la “seguridad alimentaria” (pero no la seguridad de los alimentos), centrándose en “fortalecer la soberanía alimentaria” y “diversificar y reducir aún más las importaciones de insumos y productos básicos críticos”. 

Otros comisarios relacionados 

El chipriota Kadis estará a cargo de la cartera de Pesca y Océanos. Será el encargado de sacar adelante el primer "paquete europeo sobre los océanos", además de garantizar un "sector resiliente, competitivo y sostenible". 

Para el puesto de comisario de Comercio y Seguridad Económica y comisario de Relaciones Interinstitucionales y Transparencia, ha sido designado al eslovaco Maroš Šefčovič, que con este cumple un cuarto mandato en la Comisión. 

Por otro lado, la CE contará por primera vez con un comisario de Bienestar Animal, también de Sanidad, para el que Von der Leyen ha presentado al húngaro Olivér Várhelhy. Esta cartera incluye la seguridad de los alimentos, incluida la legislación sobre las nuevas técnicas de edición genética y los pesticidas. T

ambién tendrá la tarea de prevenir y reducir el desperdicio de alimentos, así como de mejorar la “sostenibilidad, seguridad y asequibilidad de la producción de alimentos en toda la cadena alimentaria”, haciendo hincapié en la producción orgánica y el biocontrol. 

El Comisario de Sanidad y Bienestar Animal será el húngaro Olivér Várhelyi. Es el actual comisario de Vecindad y Ampliación y ya ha generado distintas polémicas, la más reciente por suspender de manera unilateral una serie de fondos destinados a Palestina.