Aceite de oliva Cuatrimestre C2 2022. Incremento de los precios por la mayor demanda de aceites refinados

AGOSTO 2022 | La campaña 2021/22 se ha desarrollado de forma positiva para el sector a pesar del incremento de los costes de producción. No obstante, ha estado lejos de ser una campaña tranquila, en la que la geopolítica y el comportamiento general del mercado de aceites vegetales ha tenido un papel más relevante de lo habitual.

Este período se ha caracterizado por:

► Una previsión de cosecha limitada que favoreció las cotizaciones al inicio del periodo productivo y una cierta contracción de los volúmenes exportados por los elevados precios en los primeros meses de la campaña. No obstante, la cosecha final recolectada española se ha visto favorecida por las lluvias de los últimos meses del 2021.

► Posteriormente, el conflicto bélico en Ucrania ha afectado al mercado de los aceites vegetales mundiales, que ha sido influenciado por el posible desabastecimiento y el racionamiento de aceite de girasol en los supermercados. Registrando una mayor demanda en los aceites y manteniendo elevados los precios de todas las categorías, especialmente las de lampante que en algunos momentos de la campaña ha cotizado a un precio cercano al de AOVE y AOV.

► La guerra también ha provocado un estrechamiento entre los precios de aceite de girasol y oliva, que son los dos principales aceites consumidos en España, provocando un crecimiento de la demanda nacional de aceite de oliva, al tiempo que mantuvo un ritmo de exportación más lento que en el anterior periodo, pero con un buen comportamiento en términos económicos.

► Las previsiones mundiales de cosecha para 2022/23 son inferiores a las de la campaña actual, lo que ha incentivado la demanda del mercado interior y exterior en el tramo final de la campaña.

Se espera que el inicio de la campaña 2022/23 siga influenciado por los movimientos geopolíticos respecto al conflicto Rusia-Ucrania, además de por la sequía y las previsiones de menor cosecha que afectarán positivamente a las cotizaciones, a pesar de que iniciarán la campaña con cotizaciones altas, aunque la gran incógnita es cuanto afectará al consumo de aceite de oliva los precios altos y la situación económica debido a la inflación.