20 November 2024
EFE Verde - El Gobierno danés anunció en la cumbre del clima de Bakú su nuevo acuerdo de 'tripartito verde', que impulsará un impuesto de carbono aplicable al sector agrícola, principalmente a la ganadería, y que espera “sirva de inspiración a la UE”.
El paquete de medidas que ha logrado apoyos en la coalición del Gobierno danés, y en otros partidos en el Parlamento, introducirá un impuesto climático de 16 euros (120 coronas danesas) por tonelada de carbono emitida y que se incrementará hasta los 40 euros (300 coronas) por tonelada en 2035, tras aplicar una reducción de base del 60 %.
El impuesto será de 16 euros por tonelada de carbono emitida
“Esperamos que nuestro ejemplo sea seguido por otros y que sirva de inspiración para desarrollar el futuro de la política agrícola de la UE”, dijo a un grupo de periodistas en la COP29 de Bakú el ministro de Clima y Energía de Dinamarca, Lars Aagaard.
“El acuerdo allana el camino para un sector agroalimentario danés capaz de aportar soluciones tangibles a algunos de los imponentes retos relacionados con el clima y la naturaleza”, aseguraron desde el Gobierno danés, que con este paquete de políticas busca rebajar en un 60 % las emisiones de su sector agrícola.
El nuevo gravamen climático irá acompañado por inversión pública con la que se espera desarrollar nuevas tecnologías, “para que los agricultores tengan la oportunidad de rebajar sus emisiones” y, al mismo tiempo, para “aumentar sustancialmente la superficie cubierta por bosques, humedales, etcétera”, señaló el ministro.
Por ejemplo, el Gobierno creará un esquema de subsidios para almacenar biochar, un carbón vegetal que se produce calentando biomasa, esquema al que se destinarán 1.300 millones de euros hasta 2045.
La recaudación del impuesto sobre el ganado a lo largo de 2030 y 2031 se devolverá a la industria “a través de un plan de transición que reforzará la transición ecológica de la industria”, según el Gobierno danés.
Aagaard aclaró que los consumidores apenas notarán la tasa, porque “el propósito del impuesto no es ser una carga (...), sino generar incentivos para desarrollar nuevas tecnologías y soluciones”.
“Creo que en muchos aspectos hay gente interesada en utilizar el clima como herramienta para separarnos y crear conflictos. Así que nuestro enfoque para desarrollar este tipo de reformas es invitar a las distintas partes, en este caso a las ONG, pero también a los agricultores, para que encuentren una solución junto con el Gobierno”, afirmó.
También defendió que para afrontar el reto político debe haber “una voluntad de invertir los beneficios en esta transición, porque si se pone toda la carga en el agricultor individual, puede ser demasiado difícil para ellos, y entonces se opondrán”.
“Basándonos en esto, conseguimos encontrar una amplia coalición en nuestro parlamento para apoyarlo”, agregó.