Inquietud en el sector: el volumen importado de alimentos crece como nunca

El valor de las exportaciones agroalimentarias continúa batiendo récords. Durante el primer semestre de 2023 se registra una variación interanual del 6,1 % y se superan los 36.000 millones de euros de ingresos. 

El volumen comercializado retrocede un 9,1 % interanual. No obstante, la caída se frena con la obtenida hasta mayo, que alcanzó el 9,9 %; lo que indica una leve recuperación de la cantidad de alimentos vendida al exterior. 

Tal y como se ha indicado en Plataforma Tierra en diversos informes previos, la producción agraria de España se ha resentido a causa de las condiciones coyunturales que han afectado a los diferentes sistemas productivos, entre las que se encuentra la sequía; lo que se ha traducido una reducción de la oferta. 

España necesita cada vez más alimentos

El valor y el volumen de las importaciones de alimentos de España vuelven a marcar un máximo histórico durante los meses de enero a junio. Las compras al exterior superan los 27.000 millones de euros, con un crecimiento interanual del 10,8 %. En cuanto a la cantidad adquirida casi llega a las 26.000 miles de toneladas, con un crecimiento interanual del 15,7 %.

Las exportaciones e importaciones vuelven a batir récords

Durante el mes de junio de 2023 se detecta una desaceleración del crecimiento del valor de las importaciones y un incremento del volumen de las compras exteriores, lo que refleja un descenso del precio de los alimentos pagado por España. 

El déficit de alimentos en España se sitúa en el primer trimestre en 7,5 millones de toneladas, creciendo interanualmente un 231 %. La situación coyuntural que padecen algunos sectores puede ampliar dicha cantidad durante los próximos meses. 

La dependencia agroalimentaria de España del mercado exterior aumenta

Sin embargo, el saldo comercial supera los 9.030 millones de euros en junio, reduciendo su caída interanual con respecto al pasado mes de mayo que era del 7,9 % frente al 5,9 % obtenido en junio.

Productos más exportados 

En el primer semestre del año se afianza el liderazgo de los principales productos exportados en valor, aunque el volumen se reduce en hasta un 45,6 %. Las frutas lideran el ranking de exportaciones. 

Los mayores ascensos interanuales lo registran las carnes, las hortalizas, las preparaciones alimenticias y las conservas de carne y pescado, con aumentos que van desde los 200 hasta los 300 millones de euros. Aunque son los productos de molinería los que manifiestan el mayor incremento interanual con 37,8 %. 

En términos absolutos, existe una estabilidad en las ventas exteriores de los lácteos, otros productos de origen animal y las plantas vivas y ornamental. Los aceites registran la mayor caída de ventas por la fuerte reducción de la oferta que ha originado la sequía. 

El mes de junio de 2023 es positivo para los azúcares (28,1 %), las preparaciones alimenticias (19,7 %) y las hortalizas (18,2 %). Aunque el producto que más incrementa sus ventas en valor son las carnes (78 millones de euros), siendo además el segundo más exportado (907 millones de euros) tras las frutas (1.039 millones de euros). 

Productos más importados

Los cereales presentan el mayor ascenso interanual en volumen de importaciones, con un 35,1 %. La perspectiva es que esta situación se mantenga a causa de la mala cosecha española por la sequía. 

No obstante, existe bastante incertidumbre sobre la evolución que puedan presentar los mercados internacionales de grano por la dificultades para exportar por parte de Ucrania, y por los efectos que las incidencias climatológicas puedan tener en otras importantes regiones productoras.

El precio de los cereales se ha ido reduciendo desde los máximos del verano del año pasado, pero esta tendencia parece haberse detenido e incluso muestran una ligera tendencia al alza. 

La evolución de la cosecha de maíz y las primeras estimaciones de cosecha realizadas en el hemisferio sur durante este último trimestre del año marcará la cotización durante los próximos meses.

Debemos recordar la importancia que tienen estas materias primas para el sector ganadero español, por lo que deberemos estar atentos a su evolución para analizar posibles consecuencias sobre la producción y exportación de los productos cárnicos.

A este producto le siguen en volumen los azúcares (33,5 %), las hortalizas (30,3 %) y las bebidas, con incrementos aún mayores en valor, que en el caso del azúcar se ha incrementado en un 82 % en un contexto inflacionario y tras las malas cosechas en algunos países exportadores. 

En lo que respecta a las bebidas, se registra un descenso interanual del volumen importado del 23,2 %, pero su valor se incrementa un 10,1 %. En junio se ven reforzadas las importaciones de dichos productos con respecto al mismo mes del año anterior.  

Destinos de las exportaciones

Las exportaciones agroalimentarias españolas dependen de 20 socios comerciales, concentrando alrededor del 85 % del valor y volumen de las ventas españolas hacia el exterior. 

Rumanía, República Checa y Marruecos muestran la mayor variación interanual del valor con tasas de crecimiento que alcanzan casi el 30 %. Aunque su explicación es diversa. En Rumanía y República Checa crecen las exportaciones de carne en hasta un 60 %, mientras que en el territorio marroquí se disparan las ventas de animales vivos (234,8 %) y aceites y grasa animales (14,4 %).

El comportamiento más negativo, entre nuestros principales socios comerciales, lo tienen Estados Unidos, Dinamarca y Corea del Sur. Por grupos de productos, la disminución de ventas hacia Norteamérica ha correspondido a las carnes (-38,4 %), los jugos y extractos vegetales (-52,3 %) y las grasas y aceites animales (-14,2 %), mientras que en Dinamarca son las frutas (-9,1 %) y los jugos y extractos vegetales (61,9 %) y en Corea del Sur son las carnes (-14,7 %) y las grasa y aceites animales (-43,2 %).

Origen de las importaciones

En cuanto a las importaciones, los 20 principales países proveedores suponen alrededor del 80 % del valor y el volumen de los alimentos que compramos en el exterior. 

La mayor tasa de incremento anual la registra Ucrania (84,5 %), gracias al acuerdo de cereales del Mar Negro que ha permitido mantener el flujo de comercio durante el primer semestre del año. Existe la duda de lo que puede ocurrir a partir de ahora por las dificultades para mantener el acuerdo existente. 

Le siguen Reino Unido (64,5 %) y Suecia (48,4 %), principalmente gracias a una mayor adquisición de grano. En caso del país británico se pasa de importar 34 miles de toneladas de cereales a 720 miles de toneladas. 

En el lado opuesto se encuentra Argentina (-34,5 %) por una reducción de las compras de residuos agroalimentarios (-51,9 %), China (-26,2 %) a causa de aminorar el suministro de grasas y aceites animales o vegetales (-65,7 %) y Estados Unidos a consecuencia de una caída casi total de comercio de cereales (-96,4 %), frutas (-16,5 %) y residuos de la agroindustria (-32,4 %).

Exportaciones autonómicas 

Cuatro comunidades autónomas concentran más del 66 % de las exportaciones agroalimentarias, siendo Andalucía, Cataluña, la Comunidad Valenciana y la Región de Murcia. Aunque el comportamiento entre ellas es distinto.

Andalucía lidera el ranking, aunque experimenta un retroceso interanual de sus ventas del 4,2 %, principalmente por una caída de las frutas (7,2 %) y grasas y aceites animales y vegetales (-13,1 %), en este último caso a consecuencia de la mala cosecha de su olivar.

Cataluña por su parte incrementa sus ventas a terceros países en un 9,1 % y, es posible, que durante los próximos meses arrebate a Andalucía el liderazgo de las exportaciones, todo ello gracias a un ascenso del valor de las carnes (11,1 %), productos lácteos (58,7 %) o frutas (13,8 %), entre otros. 

Aragón es el territorio que registra la mayor tasa de crecimiento del valor de las exportaciones (26,9 %), a pesar de reducir el volumen vendido en un 12,7 %. Las carnes facilitan dicho ascenso.

Importaciones autonómicas

Cataluña, Andalucía y la Comunitat Valenciana concentran más del 50 % del valor de las importaciones de alimentos. La situación coyuntural de los mercados lleva a que muchas de las regiones hayan incrementado en gran medida sus compras de alimentos tanto en valor como en volumen. 

El País Vasco registra el mayor incremento interanual del volumen de sus importaciones, con una tasa del 85,6 %, gracias a un ascenso de la importación de productos de molinería, preparaciones alimenticias u hortalizas.

Reflexión final 

El mercado exterior agroalimentario español se encuentra en una compleja situación. 

Por un lado, el valor de las exportaciones continúa batiendo récords a pesar de reducir interanualmente el volumen comercializado en casi una décima parte, lo que indica un fuerte incremento del precio pagado por unidad de producto.

Ahora bien, esto entraña serios riesgos, pues si este incremento del precio no va en paralelo a un mayor valor diferencial en calidad, nuestros socios comerciales podrían recurrir a nuevos proveedores de alimentos para satisfacer su demanda de alimentos. 

Los mercados son muy difíciles de conquistar, pero muy fáciles de perder. Por ello es importante que exista una estrategia a largo plazo de competitividad, rentabilidad e internacionalización, apostando por una producción sostenible y de alta calidad que permita asegurar una sólida posición de España en el mercado exterior.

Por otro lado, en España, las importaciones de alimentos crecen como nunca tanto en valor como en volumen, lo que refleja la vulnerabilidad frente a crisis climáticas futuras. En el primer semestre se han necesitado 7,5 millones de toneladas de productos agroalimentarios más de los que hemos exportado para cubrir la demanda española. 

Esto no quiere decir que en España vaya a existir una crisis alimentaria y vayan a faltar productos en los lineales de los supermercados. Sin embargo, si refleja un aumento de la dependencia de terceros países en materia agroalimentaria, que de prolongarse en el tiempo, puede llevar a reducir la soberanía agroalimentaria del país. 

Llegados a este punto merece la pena de realizarse la pregunta: ¿qué ocurrirá en los próximos meses en el mercado agroalimentario exterior? 

La respuesta a dicha pregunta no es fácil. Aunque presumiblemente vamos a observar como el valor de las exportaciones continúa creciendo progresivamente, a la vez que se recupera el volumen comercializado a causa de una recuperación de las cosechas internas. Aunque la clave de todo la tienen las lluvias de otoño. 

Por ello, tendríamos que pensar que cuando vuelva a llover deberíamos de tener la capacidad de almacenar el agua que sobre para cuando nos vuelva a faltar.

Además, de ser lo más eficientes y prudentes posibles en la gestión de los recursos hídricos para que nuestros cultivos puedan satisfacer sus necesidades y mantener así altas producciones.