Noticias de ganadería y medioambiente

La RAE define noticia como una información sobre algo que se considera interesante divulgar. Por tanto, detrás de una noticia hay tres elementos esenciales: la información, el interés para ser divulgada y la decisión sobre la relevancia de la primera. La primera es un hecho objetivo; el segundo y la tercera son subjetivos. 

El pasado 19 de octubre el Ministerio de Agricultura publicó una información relevante desde el punto de vista del medioambiente y la ganadería: el 75 % de las granjas porcinas, que recogen al 90 % del censo, han implementado las mejores técnicas disponibles para reducir los niveles de emisiones en sus instalaciones, en 2022, según un informe elaborado por el propio Ministerio. 

Las tecnologías que han sido validadas científicamente como método para reducir alguno de los impactos ambientales de una actividad económica, y que son reconocidas como tales por las Administraciones, reciben el nombre de mejores técnicas disponibles (MTD). 

De acuerdo con la nota de prensa, la consecuencia de la aplicación de estas tecnologías es la reducción de las emisiones de amoniaco de las explotaciones porcinas españolas en 2022. La cuantificación de esa reducción es del 5,9 % en un año, que es una cifra notable a mi modo de entender.

El resto de la nota, que es muy corta, concreta dónde se concentran los esfuerzos de utilización de tecnologías. Se hace referencia a los equipos de aplicación de los purines en campo y el ajuste de los niveles de proteína de los piensos a las edades de los animales. 

No obstante, a partir de una sencilla búsqueda en internet se puede llegar al informe original, en el que se tiene acceso a todas las medidas adoptadas. 

Un vistazo rápido a las conclusiones del informe muestra el esfuerzo inversor que está haciendo el sector productor, y el cambio en las prácticas de manejo, que conducen a una reducción de una amplia gama de impactos ambientales, entre los que destacan la emisión de gases de efecto invernadero o la mejora de la calidad de las aguas. 

Como persona que trabaja en el sector agroalimentario, con una dedicación importante la sostenibilidad ambiental, soy consciente de que, detrás de este cambio en la forma de hacer las cosas, hay una normativa, de 2020, que obliga a las granjas porcinas a reducir sus emisiones y a declarar las prácticas utilizadas en sus explotaciones para conseguirlo. 

No obstante, el informe hace referencia a 2022 y la obligación de reducción de emisiones entró en vigor a principios de 2023.

Es evidente que el sector porcino español, como el resto de los sectores agroalimentarios, se han puesto a trabajar para cumplir con los objetivos de sostenibilidad que les marcan las directrices del pacto verde y de las legislaciones nacionales. Y eso incrementa los costes de producción. 

El Ministerio de Agricultura, cuando publicó su nota de prensa, consideró que la información era noticiable. Esta mañana he buscado en los medios de comunicación generalistas y sectoriales para ver el tratamiento que le daban a la noticia. El resultado ha sido un poco frustrante, porque solo algunos medios sectoriales, y dos generalistas, la recogían. Quizá no se ha considerado ni relevante ni interesante.

Que cada uno saque sus propias conclusiones.