Datos, datos y más datos… para la IA en ganadería

El Observatorio de la Digitalización del Sector Agroalimentario Español, un proyecto impulsado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación en colaboración con el Grupo Cajamar, ha desarrollado una nueva jornada de transferencia. En esta ocasión, la temática seleccionada fue la aplicación de sistemas de inteligencia artificial en la sanidad animal en ganadería.

El tema es relevante, como han demostrado los estudios del propio Observatorio, ya que la monitorización de la sanidad animal es una de las cuestiones más importantes para los ganaderos. Esto se debe al gran impacto que tiene en todas las variables de las granjas.

Los datos como cimiento

En una jornada sobre inteligencia artificial, los datos monopolizaron gran parte de las comunicaciones y de la mesa redonda. 
Diversos ponentes de la jornada indicaron que la base de los sistemas de inteligencia artificial reside en los datos. Actualmente, debido al proceso de transformación digital, se está expandiendo el uso de la sensórica, lo que permite la recolección automatizada de indicadores en las explotaciones ganaderas.

La tipología de información que se puede recolectar en las explotaciones es muy variada. Estos registros, resumidos en la siguiente diapositiva, incluyen información sobre reproducción, alimentación, producción, operaciones de las granjas y emisiones ambientales.

Sin embargo, lo más importante es que están correlacionados entre sí, y cualquier cambio en una de las variables puede tener efectos significativos en las demás.

No obstante, como señaló un ponente en su presentación: "Actualmente nos encontramos con granjas que son ricas en datos, pero pobres en información". Esto se debe al escaso análisis que se realiza sobre estos indicadores, lo que implica que los ganaderos poseen un material al que podrían sacar un alto valor añadido, pero que no están utilizando.

El ponente mostró una diapositiva muy reveladora sobre los niveles existentes en la generación de información, en concreto, cinco. Explicó que los ganaderos pueden tener implantadas alertas y sistemas de monitorización en paneles de control, pero no aplican técnicas que mejoren la calidad de la información. 

Pocas explotaciones utilizan análisis estadísticos que les permitan identificar tendencias y tomar decisiones. Menos aún usan sistemas de inteligencia artificial, que permitirían a veterinarios y técnicos realizar análisis predictivos, como la identificación de contactos infecciosos en las granjas, la detección de granjas superdiseminadoras o la modificación de variables clave para tener un control integral de la granja.
 

En la actualidad, ya existen diversas soluciones tecnológicas que permiten aplicar los sistemas de inteligencia artificial en las granjas, tanto en el sector porcino, que podría ser el de mayor interés económico según sus cifras macroeconómicas, como en el sector bovino, tanto de carne como de leche, o para los pequeños rumiantes; tal y como se observó en la jornada de transferencia. 

Realidad virtual con inteligencia

La inteligencia artificial también puede integrarse en otras tecnologías relevantes que trae la digitalización, como los gemelos digitales. Estos sistemas consisten en la réplica de un espacio físico en un entorno virtual.

Sin embargo, en función de la profundidad tecnológica, se pueden observar diferentes tipos de modelos de gemelos digitales. La inteligencia artificial se aplica principalmente cuando se utilizan estudios predictivos en estos gemelos digitales.

Con esta tecnología, es posible realizar una monitorización integral de las explotaciones. No obstante, primero es necesario identificar las necesidades de cada área de la granja, ya que, por ejemplo, los ganaderos tendrán unas demandas y el equipo veterinario, otras.

Como se presentó en la jornada de transferencia, el gemelo digital puede detectar qué animales no están bien nutridos o qué dispositivos de la granja, como los ventiladores, por ejemplo, pueden requerir mantenimiento o sustitución, lo que permite una mejor planificación. 

Al debate

Después de las ponencias, tuvo lugar un enriquecedor debate sobre los sistemas de inteligencia artificial.

En primer lugar, y en relación con los datos, se destacó que, aunque en las explotaciones se genera una gran cantidad de datos, se obtiene poca información realmente útil. Algo ya indicado en la fase de ponencias. 

Sin embargo, lo más relevante fueron las reflexiones sobre la transferencia de datos. La normativa actual es muy restrictiva en cuanto a su compartición, lo que representa un obstáculo para el desarrollo de los sistemas de inteligencia artificial.

En segundo lugar, se preguntó a los participantes sobre el tamaño mínimo de explotación para que resulte rentable aplicar estas tecnologías, ya que el aspecto económico es una de las principales barreras en la transformación digital.

Los panelistas señalaron que no existe un tamaño mínimo para implementar estos nuevos productos y servicios, debido a los beneficios que aportan a los ganaderos. No obstante, es cierto que, cuanto mayor es el tamaño de la explotación, más adecuada y rentable resulta la aplicación de estas tecnologías.

En tercer lugar, se abordó la cuestión de la captura automatizada de datos. Se subrayó que las tecnologías han avanzado lo suficiente como para permitir la captura y almacenamiento automatizados de las variables de interés.

La recolección automatizada facilita la justificación y la transparencia ante el consumidor y el mercado, al mostrar las condiciones en las que se lleva a cabo la producción ganadera.

No obstante, esto requiere un cambio de mentalidad por parte de los ganaderos para implementar dichas tecnologías, un cambio que ya se está produciendo.

En cuarto lugar, se debatió cómo va a cambiar el ejercicio profesional del equipo de veterinarios y cómo la inteligencia artificial impactará en el sector.

En este ámbito, se destacó la necesidad de actualizar los planes formativos, tanto para los nuevos estudiantes como para los ya egresados, con el fin de incorporar los nuevos conocimientos sobre inteligencia artificial. 

La tecnología facilitará su trabajo, por ejemplo, realizando menos visitas clínicas; y les permitirá controlar más variables que antes no podían ser analizadas debido a las limitaciones en el manejo de datos. 

Aunque la mejor combinación será la sinergia entre la inteligencia humana del veterinario con la inteligencia artificial ¿habrá algo mejor que este tándem en el futuro?