7 min

El cultivo del olivar en España: características, producción y distribución

16 January 2025
Desarrollo Rural
Producción Vegetal
España es líder en producción de aceite de oliva con mas de 2,8 millones de hectáreas dedicadas a este cultivo
Olivar español.

16 January 2025

El olivar es uno de los cultivos más emblemáticos de España, no solo por su tradición histórica y cultural, sino también por su relevancia económica.

España se sitúa como líder mundial en la producción de aceite de oliva, cultivo que ha moldeado el paisaje, la economía y la dieta mediterránea del país, convirtiéndose en un pilar fundamental de la identidad española.

Los olivares españoles, caracterizados por su biodiversidad y variedad, han vivido en las últimas décadas una transformación significativa, impulsada por avances tecnológicos y prácticas agrícolas sostenibles que buscan responder a los desafíos del cambio climático y la creciente demanda global. 

España líder en producción de aceite y cultivo de aceitunas    

España destaca como el líder indiscutible en la producción de aceite de oliva a nivel mundial, representando el 70 % de la producción de la Unión Europea y entre el 40 y el 55 % de la producción mundial.

En 2023/2024, España produjo alrededor de 766.500 toneladas métricas de aceite de oliva, siendo el principal productor del mundo. 

 

 

Además, como es evidente, también es el principal exportador de aceite a escala mundial, destinando una gran parte de su producción a mercados en Europa, Estados Unidos y recientemente a países de Asia, donde la apreciación por el aceite de oliva sigue creciendo.

En 2023, en concreto, España lideró la exportación de aceite de oliva con un valor aproximado de 4.343 millones de dólares, seguida por Italia y Grecia.

 

Aceite de oliva con calidad certificada

La calidad excepcional del aceite español no solo se refleja en su sabor y sus propiedades saludables, sino también en su reconocimiento internacional, respaldado por numerosas Denominaciones de Origen Protegidas (DOP) que garantizan su autenticidad y trazabilidad.

España cuenta con 31 denominaciones de origen del aceite de oliva, además de 2 indicaciones geográficas, repartidas a lo largo de todo el territorio, incluyendo nombres prominentes como 'Sierra de Segura', 'Priego de Córdoba', y 'Montes de Toledo', entre otros.

La producción de aceite de oliva en España se divide en varias categorías, siendo el aceite de oliva virgen extra (AOVE) el de mayor calidad, seguido por el aceite de oliva virgen y el aceite de oliva.

 

web-aceite-oliva-enero-2025.png

Variedades de aceitunas cultivadas en España y sus usos

En España, con su diversidad climática y geográfica, se cultivan una amplia variedad de aceitunas, cada una con características únicas que influyen en el sabor y la calidad del aceite producido. 

Entre las más de 250 variedades registradas, algunas más orientadas a la producción de aceite y otras a su consumo en mesa. Entra las más famosas, por su relevancia y preferencia, son:

  • Picual: es la más extendida en España, especialmente en la región de Andalucía (Granada, Jaén y Córdoba). Orientada a la producción de aceite, es especialmente valorada por su alta estabilidad, creando aceites que mantiene sus propiedades saludables y organolépticas durante más tiempo en comparación con otros tipos. El aceite obtenido de Picual combina toques frutales con un final amargo y picante.
  • Arbequina: tradicional de Cataluña y Aragón, esta pequeña aceituna produce un aceite muy fluido y aromático, preferido por su sabor frutal y suave que no domina los platos, lo que lo hace ideal para la cocina internacional que requiere un toque de aceite de oliva sin sobrepasar otros sabores. 
  • Hojiblanca: otra de las más comunes en Andalucía (Málaga, Sevilla, Granada y Córdoba). La Hojiblanca es apreciada tanto para la producción de aceite como para su consumo directo en ensaladas y otros platos. Como aceituna de mesa, es conocida por su textura firme y sabor ligeramente dulce, que la hace perfecta para aperitivos y acompañamientos.
  • Cornicabra: se produce principalmente en el centro de la península (Madrid, Toledo y Ciudad Real). Con ella se consigue un aceite altamente valorado por su perfil sensorial, que incluye notas de frutas, lo que lo hace ideal para usar en platos que requieren un sabor más pronunciado. 
  • Lechín, Verdial y Manzanilla: estas también son importantes. Lechín produce un aceite suave y ligeramente dulce, perfecto para el consumo diario; Verdial se utiliza a menudo para aceitunas de mesa debido a su tamaño grande y sabor característico; y Manzanilla es otra aceituna popular de mesa, conocida por su sabor equilibrado y carne tierna.

Distribución geográfica de olivar en España    

La distribución del olivar en España es un claro reflejo de cómo la geografía y el clima influyen en la agricultura. 

Con más de 2,8 millones de hectáreas dedicadas a su cultivo y más de con 340 millones de olivos, según los últimos datos de la encuesta de ESYRCE del MAPA, España es el país con mayor superficie de olivares del mundo, y esta vasta extensión se distribuye de manera desigual a lo largo de la península.

De esta, el 93 % esta destinado a la producción de aceite de oliva, mientras que solo el 3% está dedicado a aceitunas de mesa, según datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación

 

web-mapa-olivar-españa-EOM.png
Fuente: El Orden Mundial.

 

  • Andalucía, en el sur de España, es la región por excelencia del olivar español. Representa aproximadamente el 60 % de la superficie total de olivares en España, con 1,67 millones de hectáreas, y es reconocida mundialmente por la calidad de su aceite de oliva. Dentro de Andalucía, destaca especialmente Jaén, seguido de provincias como Córdoba, Sevilla, Málaga y Granada. Aquí predomina el cultivo en secano, aprovechando las variedades tradicionales como la Picual.
  • Castilla-La Mancha es otra región destacada con el 16 % de la superficie olivarera española, especialmente en las provincias de Toledo y Ciudad Real, donde el cultivo del olivar está en expansión, adaptando variedades que pueden prosperar en sus condiciones climáticas más extremas. Esta región, es conocida por sus técnicas de cultivo intensivo y superintensivo, con variedades como la Cornicabra.
  • Extremadura: aunque con una superficie menor (11 %), está aumentando su producción de olivares, especialmente en las áreas de Badajoz y Cáceres. La región, con cultivo tanto tradicional como de secano, está invirtiendo en modernización e innovación para mejorar la eficiencia y sostenibilidad de sus olivares.
  • Cataluña y Valencia: también tienen áreas significativas de cultivo de olivar, con el 4% y el 3%,respectivamente. Estas regiones promueven un modelo de agricultura más diversificado, combinando el olivar con otros cultivos y prácticas agrícolas.

Cómo está evolucionando el cultivo del olivar en España

La modernización de las prácticas agrícolas, junto con un enfoque creciente en la sostenibilidad y la tecnología, está transformando la industria del olivar español.

La sostenibilidad es otro pilar fundamental de la evolución del olivar en España. Iniciativas como la producción integrada y la agricultura ecológica están ganando terreno, enfocándose en métodos que respetan el medio ambiente y promueven la biodiversidad. Concretamente el cultivo del olivar ecológico aumentó un 11,6 % en 2023.

Según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación de España, también ha habido un aumento significativo en la superficie de olivar bajo riego, aumentando un 18,3 % en los últimos años, lo que ha contribuido a estabilizar la producción frente a las variaciones climáticas.

La agricultura de precisión, que incluye el uso de drones para monitorear el estado de los cultivos y la implementación de sistemas de riego inteligentes, ha permitido optimizar el uso del agua y los nutrientes, mejorando así la eficiencia y reduciendo el impacto ambiental.

 

 

Programas de mejora genética y estudios sobre la resistencia de las variedades de olivo a enfermedades y plagas están en curso, buscando variedades más resilientes y adaptadas a las condiciones climáticas cambiantes.

Esta transformación del cultivo del olivar refleja un equilibrio entre mantener la tradición y abrazar la innovación, asegurando que España continúe liderando la producción de uno de los productos más de mayor calidad en el mundo gastronómico.