El futuro del sabor: el uso de la IA en el desarrollo de sabores y texturas de alimentos

¿Imaginas comer algo diseñado por inteligencia artificial? La IA está revolucionando el mundo a una velocidad vertiginosa, impactando en diversos sectores, desde la medicina hasta la agricultura.

En el sector agroalimentario cada vez hay más empresas que aprovechan el potencial de la inteligencia artificial para desarrollar nuevos productos, mejorar su calidad y satisfacer las crecientes demandas de los consumidores.

A través de herramientas como el machine learning y los algoritmos predictivos, la IA están siendo aplicada para analizar las preferencias de los consumidores, anticipar tendencias de mercado y desarrollar productos más personalizados.

Se estima, que el uso de la inteligencia artificial en la industria de alimentos y bebidas crecerá un 45,7 % entre 2021 y 2027, impulsado por tecnologías como la automatización y la robótica, que mejorarán la productividad hasta en un 20 %.

Esto incluye avances en la creación de alimentos más sostenibles y personalizados, como las alternativas plant-based. 

Como se aprecia en el gráfico, la IA es una de las áreas tecnológicas con mayor potencial económico a corto y medio plazo. De hecho, se estima que su valor de mercado podría superar los 300.000 millones de dólares en 2026.

Qué es la inteligencia artificial y cómo funciona

La inteligencia artificial es una rama de la tecnología que permite a las máquinas aprender, razonar y tomar decisiones de manera autónoma. 

La IA se basa en algoritmos complejos y redes neuronales que analizan grandes volúmenes de datos, identifican patrones y generan predicciones. Permiten a las máquinas aprender por sí mismas y tomar decisiones basadas en los datos que reciben. 

La inteligencia artificial cada vez se aplica en más áreas de trabajo. Ahora también es capaz de participar en el proceso de elaboración de alimentos como el desarrollo de sabores nuevos y texturas.

Cómo se utiliza la IA en el desarrollo de sabores y texturas en alimentos

El desarrollo de nuevos productos en empresas alimentarias, tradicionalmente contaba con información limitada, enfoques de prueba y error con costes elevados y ajuste de precios muy limitado entre el producto y el mercado.

La integración de inteligencia artificial en la elaboración de productos se está aplicando a lo largo de diferentes fases de la cadena de producción, con la finalidad de mejorar la calidad de los alimentos y reducir el gasto de cada etapa. 

Según la Mesa de Participación de Asociaciones de Consumidores (MPAC), la IA puede ayudar en el desarrollo de sabores y texturas mediante la utilización de algoritmos de ML que predicen las propiedades físicas y químicas de un alimento, optimizando así su composición para satisfacer las preferencias de los consumidores.

Algunas de las tareas que desempeña la inteligencia artificial (IA) en el desarrollo de sabores y texturas son:

• Prototipos virtuales: la inteligencia artificial puede simular cómo integrar diferentes ingredientes para desarrollar sabores sin la necesidad de fabricar de manera física los productos.
• Análisis de mercado: analiza grandes volúmenes de datos del mercado e identifica tendencias y preferencias de los consumidores, para facilitar la creación de nuevos productos y conseguir ventas.
• Modelado predictivo: la IA también se utiliza para prevenir cómo cambiarán los productos durante su vida útil, lo que permite mejorar la calidad del propio producto.

Beneficios de integrar la inteligencia artificial para el desarrollo de alimentos

Integrar la inteligencia artificial (IA) en el desarrollo de alimentos ofrece numerosos beneficios que están transformando la industria alimentaria:

• Reduce el tiempo: la inteligencia artificial cuenta con modelos predictivos y prototipos virtuales, que hacen que la empresa pueda reducir el tiempo de desarrollo de alimentos, pasando de meses a semanas.
• Disminuye el gasto: al minimizar los errores en las fases de experimentación y fabricación, la IA ayuda a las empresas a reducir los gastos asociados a la fase de prueba.
• Permite personalización: es capaz de crear productos alimentarios más adaptados a los gustos de los consumidores, aumentando su satisfacción.
• Mejor precisión de análisis: la IA puede analizar una mayor cantidad de datos y prever problemas de logística o producción. Además, puede analizar las tendencias y crear productos novedosos para el mercado.

Casos de éxito del uso de inteligencia artificial en el desarrollo de sabores y texturas en alimentación

Como comentábamos, la inteligencia artificial en el sector alimentario no solo se encarga de optimizar la producción, sino también ayuda a innovar y descubrir productos y alimentos nuevos.

Diferentes empresas están utilizando IA para crear sabores, texturas y alternativas que antes eran impensables, combinando la ciencia de los alimentos con la tecnología de datos. 

Esto ha permitido el desarrollo de productos alimentarios más sostenibles y personalizados, adaptados a los gustos del consumidor. 

– Nokraft Heinz y NotCo se unen para el desarrollo de nuevos productos con inteligencia artificial

Un ejemplo destacado del uso de la IA en el desarrollo de nuevos productos alimentarios es la colaboración entre Nokraft Heinz y NotCo, una startup que utiliza IA para crear productos a base de plantas que imitan los sabores y texturas de los alimentos tradicionales. 

Su inteligencia artificial es conocida como Giuseppe, se encarga de analizar la estructura molecular de los alimentos y combina diferentes ingredientes de origen no animal para crear alternativas más saludables y aptas para todas las personas, como hamburguesas y helados veganos.

– Grupo Bell ofrece una alternativa vegetal de sus marcas más famosas gracias a la IA

Otro caso notable en la integración de la IA en la industria alimentaria es el del Grupo Bell, que ha establecido un acuerdo con Climax Foods, una startup dedicada al uso de inteligencia artificial para desarrollar versiones elaboradas con productos vegetales de sus marcas más famosas, como es el caso de Babybel.

El objetivo de esta iniciativa es utilizar la IA para analizar las propiedades de los productos lácteos tradicionales a nivel molecular y sensorial. 

Estos nuevos productos serán lanzados al mercado en Europa y EEUU a finales de 2024, para proporcionar a los consumidores una experiencia similar pero con un producto más saludable.

– Coca Cola y la IA se unen para traer su nueva bebida desde el futuro

Uno de los ejemplos más fascinantes de cómo la inteligencia artificial está participando en el desarrollo de productos, es el lanzamiento de la nueva bebida de Coca-Cola, Y3000 Zero Sugar. Una nueva bebida de edición limitada que invita, según dicen, a "imaginar cómo sabe y se siente el futuro".

Esta unión muestra cómo se está utilizando la inteligencia artificial para combinar datos de conocimientos culturales y la ciencia del sabor.

Coca-Cola utilizó la IA para analizar los comentarios y preferencias de los consumidores.

A partir de estos datos, la IA fue capaz de desarrollar una combinación de sabores que no solo satisficiera a los consumidores actuales, sino que también ofreciera un sabor único.

El tiktoker australiano AngeEats, describe el sabor: "Como si hubieras utilizado una piruleta azucarada para remover una Coca-Cola normal y luego te la hubieras bebido".

La bebida Y3000 Zero Sugar es un claro ejemplo de cómo las marcas pueden aprovechar la inteligencia artificial para innovar y crear productos que conecten emocionalmente con los consumidores, respondiendo a tendencias.

Retos a los que se enfrenta la industria alimentaria por el uso de inteligencia artificial

Sin embargo, de momento, el coste de integrar la inteligencia artificial en procesos de desarrollo de alimentos es elevado y no apto para todas las empresas que pertenecen a la industria alimentaria, por lo que puede causar una desventaja competitiva en el mercado.

Además, la integración de IA requiere conocimientos técnicos y mano de obra cualificada para manejar y deben recurrir a la contratación de expertos externos o a la formación intensiva de su equipo, lo que incrementa aún más el gasto derivado de la implementación.

Otro reto es la integración de la IA en los procesos existentes. Algunas empresas tienen unos flujos o modelos de trabajo muy bien establecidos, por lo que puede ser difícil realizar cambios sin que afecte a la producción.

Por último, la resistencia al cambio y la falta de confianza en las nuevas tecnologías, hacen que muchas empresas permanezcan escépticas sobre la eficacia de la inteligencia artificial en el desarrollo de sabores y texturas en nuevos alimentos. 

Esta claro que la inteligencia artificial está cambiando nuestra forma de pensar sobre la comida y abre un mundo de posibilidades en sabores, texturas y sostenibilidad. Y tú ¿qué piensas al respecto? ¿Te imaginas un futuro donde los alimentos sean totalmente personalizados y diseñados a partir de nuestras preferencias individuales?